Las emociones pueden ser verdaderas o falsas
Las emociones pueden ser agradables o desagradables
Las emociones pueden ser positivas o negativas
Hay emociones agradables que son negativas (como sucede en
el trastorno bipolar)
Las emociones desagradables son casi siempre negativas
(excepto si nos hacen ver las cosas de una manera más productiva a largo plazo)
Las emociones pueden ser provocadas por el pensamiento
consciente, o pueden surgir de forma semiautomática
Una emoción nos transmite un
mensaje. Este mensaje puede ser obvio, o puede ser subliminal y
semiconsciente, y puede ser diferente de lo que
parece a primera vista
Es importante descifrar los mensajes que las emociones nos
transmiten, para poder decidir si les damos credibilidad
Los mensajes emocionales pueden ser verídicos o falsos.
Asimismo, pueden ser pertinentes o inadecuados, útiles o perjudiciales. Cuando
un mensaje es inadecuado o perjudicial, lo
consideramos falso, en el sentido de que no
debería producirse
Elucidar un mensaje y decidir
con objetividad que no es cierto o que no es adecuado, es FALSAR su contenido, es decir, considerarlo falso o, por
mejor decir, DARSE
CUENTA de que esa emoción es “falsa”
Las emociones falsas son mucho más frecuentes de lo que
creemos, ya que se nos presentan como la realidad
misma y no solemos ponerlas en duda
Falsar una emoción negativa es desactivarla en el sentido de que, al dejar de darle credibilidad,
la emoción deja
de provocar sufrimiento. No hay que hacer ningún esfuerzo (que
resultaría inútil) por controlar o eliminar el desagrado, basta con “darse cuenta”
El proceso de falsación
(a falta de otra palabra mejor) tiene que ser constante, hay que practicar con asiduidad para poder cambiar unos
hábitos que suelen estar muy arraigados en nosotros. Para ello, lo mejor es
tener a mano un recordatorio, que puede ser
la palabra «FALSACIÓN»
Otro paso que podemos dar en ese sentido es el de validar las emociones positivas, reforzando su
veracidad, es decir, su utilidad y oportunidad para hacernos sentir bien (sobre
todo a largo plazo), construyendo paulatinamente un “cambio
de esquema”
Una observación: Esta entrada, y otras similares, son
aproximaciones a unos fenómenos que solo pueden apreciarse correctamente
mediante la introspección. La teoría no puede sustituir a la observación
objetiva y a la práctica continuada. Solo si se obtienen resultados positivos y
apreciables podrá validarse el proceso; en caso contrario, deberá ser
descartado